21/4/09

TE ACUERDAS DEL ¿QUIÉN ES QUIÉN?

Nos cuentan en el New York Times que los de la BBC, llevaron esto de los realities a otro nivel (humor británico, supongo). La cosa es que se han inventado un programa de un simpático que lo flipas con la justificación de que pretende reducir el estigma social de la enfermedad mental. El título del programa también tiene su punto “How mad are you?”.



El programa tiene un formato al que estamos bastante habituados: bienvenidos a la casa, que si la convivencia, que si pruebas estúpidas, que si vivir con los animalitos, etc… con la particularidad que de los 10 participantes, cinco de ellos son “normales” (así lo cuentan los de la BBC en su web) y los cinco restantes tienen un diagnóstico de enfermedad mental (podemos disfrutar alegremente de diagnósticos de Trastorno Bipolar, Depresión Mayor, Anorexia, Trastorno Obsesivo Compulsivo y Fobia Social). La gracia del programa consiste en averiguar qué participantes son los que están diagnosticados de alguna psicopatología. Con la dificultad añadida de que (y es una percepción personal) las personas que se presentan a estos “experimentos televisivos” tiene un puntito de “especiales”.


La conclusión: que a los locos no se les puede encontrar fácilmente porque llevan un gorro hecho con papel de periódico o tocan la trompeta con un embudo, si no que se comportan de un modo acorde con la situación (en esta situación en concreto, raro). De hecho un panel de expertos en identificar locos, compuesto por un psiquiatra, una psicóloga y una enfermera psiquiátrica sólo fueron capaces de identificar a dos de los “enfermos”, con el agravante de que metieron en el mismo saco a dos de los participantes supuestamente sanos, vamos, los mismos aciertos que si eligieran utilizando el infalible método del pito pito gorgorito.

Sin embargo para la psiquiatra Sally Satel, que escribe la columna del NYT, el programa tiene truco, los expertos no fueron capaces de identificar a los enfermos porque estos tenían la enfermedad controlada (nadie se baba, ni dice que es Napoleón ni se balancea en una esquina cantando cualquier mantra). Y concluye, que la mejor campaña para reducir el estigma es… que los tratamientos funcionen.

Difícil estar totalmente en desacuerdo, pero ¿y si el éxito de un tratamiento estuviera condicionado a su integración social? (como sabemos que ocurre en la esquizofrenia). Lo dejo aquí… por no meterme en huevos y gallinas.

3 comentarios:

todopsicologia dijo...

Cojonuda la entrada¡¡¡¡
Una vez mas estamos con la pregunta fundamental: ¿tiene el mismo valor predictivo la psiquiatria que la astrología?. Sasz diría SIIIIIIIIIIIII. Parece que va a tener razón.
Los argumentos de la psiquiatra del NYT son con perdón, DESCOJONANTES. Encima va a resultar que las pastillas funcionan tan bien que ni se les nota......Es que cuando uno es listo, es listo de cojones. Te explico una anecdota:
hace un tiempo, una persona muy allegada a mí trabajaba en una autoescuela (era una academia que enseñaba otra cosa mucho menos frecuente, pero vamos a cambiar las actividades por si acaso se molesta la persona que menciono). El dueño de la autoescuela se dedicaba a no renovar la flota, y a hacer con la pasta inversiones personales. El caso es que un día uno de los coches se vuelca pero tiene la suerte de caer en un patatal y grácias a eso, nadie resulta herido. El tío se convierte en el centro de la noticia en Canarias, y cuando sale en la TV dice que grácias a la magnifica formación que reciben los que en su autoescuela se forman, nadie ha resultado herido (lo cual obviamente es una mentira como la copa de un pino, y el lo sabe).
Pues es lo mismo: "donde vas Michael Knight...."
Un saludo.

Juan M. Vazquez e Idoya Jarabo dijo...

Bueno, por lo menos en eses programa no ofrecen un tratamiento (¿o si?).
Lo digo porque aquí ya tenemos bastante con la "Supernany", "Hermano mayor" (que creo que empezará recientemente) o " La caja".
Estamos pensando en asociarnos con una productora porque creo que ahí está el futuro de la psicologia (je, je).
Por cierto me contaron unas amigas que se dedican a lo mismo que nosotros que hace tiempo las llamaron de una productora por si querían colaborar y reclutar familias para un programa de este tipo.
En fin...

Anónimo dijo...

Genial artículo.
Me encanta (porque se demuestra que vuelve a ser cierto) el que denominas "efecto pito pito gorgorito", juas, juas.

Estamos todos locos
Felicidades