21/9/07

LA ILOGICA LOGICA DEL SUICIDIO

Plutarco (46-125) relató una “epidemia” de suicidios entre mujeres jóvenes en Mileto, ninguna medida era capaz de evitarlo, ni la vigilancia y los cuidados de sus familiares. Lo curioso es que la epidemia se detuvo cuando las autoridades decidieron los cadáveres de las suicidas serían transportados desnudos por toda la ciudad. Si es cierto, como algunos afirman, las decisiones de las personas tienen un carácter económico (tomamos la decisión que nos aportará más beneficio o que nos supondrá menor coste), el coste personal del sufrimiento que les llevaba a buscar la muerte, era menor que el coste personal de la deshonra, aún cuándo esta deshonra no la sufrirían en vida. Podría parecer que el suicida busca únicamente el fin del sufrimiento en vida mediante una medida que supondría un final total, si embargo sucesos como el de Mileto nos indican el honor, para estas suicidas, trasciende en el tiempo, el momento de la propia muerte.

La epidemia de Mileto no es más que un ejemplo de lo que se ha denominado “efecto Werther”, que recibe este nombre por el efecto que produjo la obra publicada en 1774 por Goethe “Las penas del joven Werther” a la que sucedió una “plaga” de suicidios emulando al protagonista de la obra en cada detalle. Según Durkheim “ningún otro hecho se transmite tan rápidamente por contagio como el suicidio”. Quizá sea debido a esto, el hecho de que siendo el suicidio un problema real de salud pública (las muertes por suicidio superan en número a las muertes por asesinato y las guerras), no tengan prácticamente trascendencia en los medios de comunicación.

Y obviando que los experimentos debe hacerlos uno en su casa y con gaseosa, Derek Humphry en el años 1991 publicó “Final Exit” algo así como una guía para suicidarse mejor, lo que provocó posteriormente (además de un considerable incremento en la cuenta bancaria del señor Humphry) una sucesión de suicidios utilizando el método recomendado (asfixia con una bolsa de plástico).

Aparentemente, por todo esto, podría parecer que el suicidio es un acto reflexivo, preparado y premeditado, los métodos utilizados podrían indicar al mismo tiempo, que también hay un componente de impulsividad. Parece que el método utilizado, depende bastante de la facilidad de acceso a este. En los países en los que está legalizado portar armas de fuego, éste es el método que se lleva la palma, en las regiones rurales de China el método preferido es la ingesta de pesticidas, ¿adivináis cual es el método preferido en Nueva York?, efectivamente, se tiran por la ventana, ¿y el método preferido por los médicos?, pues sí, la sobredosis. El ahorcamiento está entre los últimos puestos habitualmente, sin embargo en Galicia el 66% de los suicidios se llevan a cabo con este método. Los adolescentes se suelen suicidar consumiendo fármacos, normalmente ansiolíticos y antidepresivos (paradójico ¿no?)

Ahí van algunos datos más (cada uno que los interprete como pueda): los colectivos laborales con más probabilidades de suicidarse son los médicos, abogados y militares. El 60% de los suicidas tienen mas de 50 años, disparándose las tasas a partir de los 65, aunque en lo últimos años se está registrando en todo el mundo un preocupante incremento de suicidios entre adolescentes y adultos jóvenes. A pesar del tópico, las personas casadas se suicidan menos que las solteras, divorciadas o viudas. El número de suicidios efectivos entre hombres triplica al de las mujeres, sin embargo el número de intentos es mayor entre las mujeres. Los hombres elegimos métodos más violentos (armas de fuego o precipitación desde lugares elevados) que las mujeres (envenenamiento o inmersión).

Y como soy partidario de la máxima a la que Watzlawikc hacía referencia en sus escritos “la situación es desesperada, pero no seria” pues ahí va el consejo.

Esta bien suicidarse … pero poquito. Salud

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy interesante el artículo...como interesante también es tu reflexión de la poca repercusión mediática del suicidio por su capacidad de "contagio" intrínseca...

Buen post.
Te sigo

Antonio Olives dijo...

La reflexión no es mía, hay recomendaciones de organismos internacionales como la OMS en ese sentido.

Aunque por otra parte suponer, que por parte de determinados medios del "todo por la audiencia", se tienen en cuenta estas recomendaciones es un poco ingenuo.

De cualquier manera, si que es cierto que la frecuencia del suicidio es enorme, y las situaciones que los rodean, en muchos casos pueden ser objeto de curiosidad morbosa.

Pedro dijo...

Había leído la noticia hace algunos días con motivo del Día Mundial para la Prevención del Suicidio y me sorprendieron las cifras. Especialmente la que afirmaba que en algunos países europeos era mayor el número de muertes por suicidio que por accidente de tráfico.
También es cierto que es muy probable que muchas muertes por suicidio sean silenciadas tanto por familiares como por el propio suicida a la hora de elegir su "método" quizás por esa deshonra personal después de muerto que comentas.
Lo curioso es que en Mileto les sirviera hacer público el suicidio para cortar la epidemia y actualmente se recomiende no difundir la noticia.
Recuerdo en mi adolescencia el suicidio de un compañero de colegio y el miedo de los profesores a que se repitiera.
Comparto la frase de Watzlawikc.
Enhorabuena por el enfoque.

A lareira de Santiso dijo...

Ola,
non te coñecía pero agora, despois do paso pola Lareira, póñote entre os "recunchos que hai que visitar", se che parece.
Gústame o teu blog e o ton ese que lle dás de que non é aínda a fin do mundo..
Vai un sorriso!

Antonio Olives dijo...

Pedro: Gracias como siempre por tu visita.

Lareira de Santiso: gracias tamén. Gustame tamén o teu blog, paréceme que fas reflexións moi interesantes. Con respeto ó enlace, eu fago o propio nos meus "Sitios que me gusta visitar"

R.R. dijo...

Aí atrás estiven dándolle voltas ó tema (por curiosidade, non por intencións) e descubrín datos terribles: o suicidio é a primeira causa de morte violenta no mundo, por diante de guerras e homicidios; a segunda causa de morte entre homes de 15 a 24 anos, terceira entre as mulleres. A primeira, os accidentes de tráfico (outro xeito de morte ben violenta e ben parva, ¿non é?), nas mulleres desas idades o cancro é a segunda.

Pero estoume pasando: mellor será que lle poña a ligazón do artigo no que moito aprendin e mailo título do libro que máis me iluminou sobre o tema: "Historia del Suicidio en Occidente" de Ramón Andrés é o libro. E a páxina que me interesou, esta:
http://www.uam.es/departamentos/medicina/preventiva/especifica/jornadas%202004/61_trabajo%20suicidio.htm

Ando á espera de recibir "El Dios Salvaje", que tamén trata sobre o tema, pero está complicado.

Noraboa polo artigo.

A veces dijo...

Ola! Atopo moi interesante o teu blog en xeral, e concretamente este artigo pola súa actualidade, curiosamente estou lendo estos días a novela dun finlandés, Arto Paasilina, titulada "Delicioso suicidio en grupo", o dato non pasa de anécdota, xa que a calidade literaria da obra non é moita, pero non deixa de ser un exemplo do "de moda" que pode estar actualmente o feito do suicidio.

Anónimo dijo...

pues yo veo el suicidio como una manera de escapar de la muerte. O dicho de otro modo, de elegir la manera de morir. Eso pensando en mi, y yastá.